Fuga de cerebros

Compañeros y compañeras.

Hoy os traemos datos que a nuestro juicio son bastante preocupantes y desalentadores, pero que a la dirección de la empresa no parecen importarle mucho.

El año pasado por el mes de abril había en nuestro centro un total de 294 trabajadores; sí, sí, has leído bien, 294, y a día de hoy (a falta de tener el censo oficial) quedamos en torno a 250, y con previsión de ser cada vez menos.

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Desde la sección sindical de Co.Bas nos hemos preguntado el por qué de estas bajas. Nos centraremos en las voluntarias ya que las forzosas, a nuestro parecer, están enmascaradas por varios motivos: que no se haya "congeniado" con el jefe, que sea una estrategia de la empresa para "desinflar" la plantilla, etc. 

Los porqués de estas bajas voluntarias a nuestro juicio son las siguientes:

  • Falta de formación
Hay proyectos en los que la "planificación" (por llamarlo de alguna manera) está ajustadísima y los jefes están esperando a que entre “Fulanito”, quien va a desempeñar labores de "desarrollador". El tal “Fulanito”, quien tiene poca o ninguna experiencia en el lenguaje de programación, entorno de desarrollo y sobre todo ninguna en el proyecto del que va a formar parte, tal como entra por la puerta el primer día lo cogen de una oreja, lo sientan, le dan su usuario y su password y le dicen: "ponte a programar" directamente.

  • Sin visibilidad de plan de carrera
Hay personas que quieren crecer profesionalmente, ya sea en responsabilidades y/o en salario, pero más allá de los 3 años todo el mundo parece terminar haciendo lo mismo. Esto es un síntoma de que la gente que quiere más ve que la propia empresa le está poniendo trabas a su crecimiento profesional. Moraleja: cuando el trabajador siente que ha llegado al "techo" de su carrera profesional en la empresa o no ve opciones para seguir creciendo, termina decidiendo marcharse a otra empresa (totalmente desmotivado, aparte).

  • Salario
Cuando el trabajador no llega a cubrir su mínimo de gastos con el exiguo salario que recibimos la mayoría, muchas veces se ve obligado a, por ejemplo, tener que compartir piso indefinidamente para "poder ir tirando" o a seguir viviendo con sus padres, lo cual provoca muchísima desmotivación.

  • Falta de beneficios sociales
Una empresa como Indra, en la cual se pregona que “disfrutarás de numerosos beneficios sociales” antes de entrar a formar parte de la plantilla, en seguida los trabajadores se dan cuenta de que deja mucho que desear en este sentido; sin ir más lejos podemos poner de ejemplo a Telefónica, la cual tiene en su convenio beneficios tan atractivos como los que listamos a continuación:
  1. Compensación por comida en residencia: “… se establece en 9 € por cada día efectivamente trabajado en jornada partida …”.
  2. Ayuda escolar: “… se abonará por cada hijo cuya edad esté comprendida entre los seis y los quince, la cantidad de 30 euros mensuales…", "... en concepto de ayuda extraordinaria escolar, se abonará en el mes de septiembre, en un pago único, la cantidad de 50 euros por cada hijo cuya edad esté comprendida entre los dieciséis y los dieciocho años”.
  3. Asistencia sanitaria complementaria: “… el coste total de la prima del seguro médico será por cuenta de las empresas y cubrirá la asistencia sanitaria a todos los empleados en activo, sus cónyuges/parejas de hecho legalmente constituidas e hijos, siempre y cuando figuren como beneficiarios de asistencia sanitaria del empleado/a titular en la cartilla de la Seguridad Social”.
Estos son algunos ejemplos de beneficios sociales que nuestra querida empresa podría instaurar y que ya vemos que nunca ha estado por la labor de siquiera proponer.

Si tenéis cualquier duda podéis poneros en contacto con nosotros en cobasbadajoz@gmail.com